(EPISODIO 52) EL FIN DE LA TETRARQUÍA O LAS ABDICACIONES DEL 305

Palacio de Diocleciano en Salona, (Split, Croacia) Ilustración de Jean-Claude Golvin

Escucar en iVoox

Terminado ya el estudio de la Iglesia hasta el siglo III, y tras haber analizado la llamada “gran persecución” llevada a cabo por Diocleciano y los tetrarcas, es hora de que analicemos la decadencia de este sistema político que tuvo a Diocleciano al frente de los destinos de Roma durante 20 años. 

Muchas guerras, campañas muy duras, que llevaron a diferentes tratados y reorganización de fronteras, y una política interior llena de reformas y de cambios estructurales que salvaron al imperio de su desaparición pero que, a la vez, cambiaron para siempre su semblante, su faz de república ficticia, para pasar a convertirse en una autocracia. 

Hoy estudiamos estos cambios y analizamos también los errores, los fallos que pudo cometer Diocleciano a la hora de estructurar su sistema terárquico, que si bien saca a Roma del atolladero, a cambio no es capaz de perdurar en el tiempo. 

Hablamos de estos fallos, y estudiamos lo cabos sueltos que dejó Diocleciano antes de su abdicación, en el 305, antes de su retiro a Salona, en donde nuestro emperador abandona la vida pública pero desde donde también es testigo del desmoronamiento de la tetrarquía. 

Se prepara una guerra total, un enfrentamiento civil como no se había visto en Roma desde hacía décadas, cuyo germen lo encontramos en las abdicaciones del 305.

Bienvenidos al episodio número 52 de EODR.

(Episodio 51) DIOCLECIANO Y LA GRAN PERSECUCIÓN. CONSECUENCIAS PARA LA IGLESIA Y EL IMPERIO

Portada sacada del cómic Murena, de Jean Dufaux Phillipe Delaby. (Ed Planeta Cómic) 
Escuchar y patrocinar en iVoox







Escuchar y patrocinar en Patreon

Nos adentramos hoy en los entresijos de la llamada Gran Persecución de Diocleciano. 

Abordamos hoy uno de los aspectos más controvertidos de este emperador y por lo que, quizá, nos es más conocido.  

Poco sabe el gran público, los no iniciados, sobre las reformas de la tetrarquía, sobre sus ajustes en materia monetaria, en temas administrativos, provinciales o militares. Pero casi todo el mundo asocia a Diocleciano a la persecución del cristianismo, la última de las purgas contra los adoradores de Cristo y también la más importante y la más trascendente. 

Hoy hablamos de esta persecución, analizando sus causas, sus motivos y también sus antecedentes, que van desde las leyes religiosas de los emperadores Decio y Valeriano entre otros (recios gobernantes del siglo III) hasta la persecución descarnada ejercida contra los maniqueos, precedente directo de los edictos anticristianos de la tetrarquía. 

Junto al análisis de los acontecimientos habrá lugar también para la anécdota y para el estudio antropológico y, de la mano del folklore, hablaremos de persecuciones desconocidas que acontecieron en las aldeas y villas del norte de Hispania, regadas desde muy antiguo por la sangre de los mártires y sobre cuyos cadalsos se erigen hoy pequeñas ermitas visigóticas e incluso soberbias iglesias románicas, hoy apenas ocultas entre los robledales del norte peninsular. 

Gracias amigos mecenas, y bienvenidos al episodio 51 de EODR.